- Para vengarse de mi actitud con usted, no ha dudado en sabotear la contabilidad de Yumitomo, sabiendo perfectamente que sus errores recaerían sobre mi!
- No lo sabía y no cometí esos errores adrede!
- Venga! Ya sé que no es usted demasiado inteligente. No obstante, nadie podría ser tan estúpido como para cometer semejantes errores!
- Si: yo.
- Basta! Sé que está usted mintiendo.
- Fubuki, le doy mi palabra de honor de que no he copiado mal adrede.
- Palabra de honor? Qué sabe usted de honor?
Rió con desprecio.
- Sepa que en occidente el honor también existe.
- Ah! Y le parece honorable admitir sin recato alguno que es usted la última de las imbéciles?
- No creo que sea tan estúpida.
- Eso habría que verlo; o es usted una traidora, o es usted una retrasada: no existe una tercera posibilidad.
- Si, hay otra: yo. Existe gente normal que se muestra incapaz de copiar columnas de cifras.
- En Japón ese tipo de persona no existe.
- Y quién se atrevería a poner en duda la superioridad japonesa? - dije adoptando un aire compungido.
- Si pertenece usted a la categoría de los disminuidos psíquicos, habérmelo dicho en lugar de permitir que le confiara esta tarea.
- Ignoraba que perteneciera a esa categoría. En mi vida he copiado columnas de cifras.
- De todos modos se trata de una curiosa deficiencia. Transcribir estas cantidades no requiere de ninguna inteligencia.
- Precisamente: creo que ése es el problema de las personas de mi especia. Si nuestra inteligencia no interviene, nuestro cerebro se duerme. De ahí mis errores.
Amélie Nothomb - "Estupor y temblores"
- No lo sabía y no cometí esos errores adrede!
- Venga! Ya sé que no es usted demasiado inteligente. No obstante, nadie podría ser tan estúpido como para cometer semejantes errores!
- Si: yo.
- Basta! Sé que está usted mintiendo.
- Fubuki, le doy mi palabra de honor de que no he copiado mal adrede.
- Palabra de honor? Qué sabe usted de honor?
Rió con desprecio.
- Sepa que en occidente el honor también existe.
- Ah! Y le parece honorable admitir sin recato alguno que es usted la última de las imbéciles?
- No creo que sea tan estúpida.
- Eso habría que verlo; o es usted una traidora, o es usted una retrasada: no existe una tercera posibilidad.
- Si, hay otra: yo. Existe gente normal que se muestra incapaz de copiar columnas de cifras.
- En Japón ese tipo de persona no existe.
- Y quién se atrevería a poner en duda la superioridad japonesa? - dije adoptando un aire compungido.
- Si pertenece usted a la categoría de los disminuidos psíquicos, habérmelo dicho en lugar de permitir que le confiara esta tarea.
- Ignoraba que perteneciera a esa categoría. En mi vida he copiado columnas de cifras.
- De todos modos se trata de una curiosa deficiencia. Transcribir estas cantidades no requiere de ninguna inteligencia.
- Precisamente: creo que ése es el problema de las personas de mi especia. Si nuestra inteligencia no interviene, nuestro cerebro se duerme. De ahí mis errores.
Amélie Nothomb - "Estupor y temblores"
2 comentarios:
They want your soul...
http://www.youtube.com/watch?v=oMduHzQ2YBE
Chase!!! Gracias por el Copy/paste de este texto. Fully Agree, Dude: "si nuestra inteligencia no interviene, nuestro cerebro se duerme..."
Rocío M
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